Día 4: LA CLAVE ESTÁ EN LA PLENITUD

 

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Día 4: La clave está en la satisfacción

Todos podemos sentir la diferencia entre el vacío y la plenitud, y es esta experiencia la que nos permite sentir el camino para decidir mejor en la vida. Hoy aprendemos que hay distintos tipos de hambre, pero un solo estado de plenitud. Cuando te das lo que realmente quieres y necesitas, los hábitos poco saludables, como comer en exceso, dejarán de ser un problema. En lugar de luchar contra un hábito que siempre se defiende, pregúntate: “¿De qué tengo hambre ahora?”, luego trata de saciar tu hambre verdadera.

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Día 4: LA CLAVE ESTÁ EN LA PLENITUD

Plenitud es la sensación de que ya no sientes necesidad, en un estado de carencia. Plenitud significa que te sientes completo y satisfecho en este momento. Es lo que realmente eres. Cuando nos sentimos incompletos o con alguna carencia, ya no estamos centrados en nuestro yo real. Este sentimiento interno de carencia es de donde provienen los antojos.

En lugar de luchar contra un hábito que siempre se defiende pregúntate: “¿De qué tengo hambre en este momento?” Luego, trata de satisfacer esa hambre directamente.

Digamos que te quedas despierto hasta tarde una noche, y a pesar de haber cenado, te encuentras hurgando en la nevera o la alacena para encontrar un bocadillo. La próxima vez que te encuentres en esta situación, intenta hacer un sencillo ejercicio. Haz una pausa por unos segundos, date cuenta de la presencia de tu conciencia interna y pregúntate: “¿Qué está pasando en realidad? ¿Qué le falta realmente a mi conciencia? ¿De qué tengo hambre en este momento?”

La respuesta es que a tu verdadero Ser no le falta nada, pero tú yo separado está emocionalmente insatisfecho. Estás aburrido y tienes hambre de estimulación. O te sientes solo y deseas la sensación de calor que te da un sabor predilecto. Sin importar cuál sea la carencia que sientas, ten en cuenta que no proviene de tu ser real; luego, sigue adelante y come un poco si lo deseas.

Como parte de este cambio, no te juzgues por las cosas de las que sientes que careces. La negación y la distracción son fáciles de encontrar en un mundo lleno de distracciones electrónicas, como los teléfonos inteligentes y la televisión. No importa si no deberías creer que te falta algo solo porque otras partes de tu vida están bien.

Muchas personas casadas son felices con sus cónyuges, pero todavía quieren más intimidad. Una madre con tres niños pequeños puede sentirse sola a pesar de esa compañía. Nuestra hambre y deseo son innegables; es lo que nos hace humanos. Tu meta es equilibrar tus verdaderas necesidades y deseos, separándolos del hambre temporal, falsa y autolimitante que nunca sacia.

La regla aquí es que solo siendo conscientemente tu verdadero Ser puedes sanar emociones. Ya no busques fuera de ti: una casa más grande, más estatus, un mejor trabajo. Esas cosas no tienen la fuerza sostenida de conocer la verdadera satisfacción interior que ya está en nuestro interior.

Recuerda la satisfacción que sientes después de una meditación profunda y pacífica. Esa es la sensación que puedes darte en cualquier momento que desees y, así, puedes esperar a estar en un estado cada vez más profundo de plenitud a medida que transcurre el tiempo.

Mientras nos preparamos para meditar juntos, consideremos por un momento nuestro pensamiento central:

CUANDO ESTOY SATISFECHO NO ME FALTA NADA

CUANDO ESTOY SATISFECHO NO ME FALTA NADA

Ahora, vamos a prepararnos para nuestra meditación. Ponte cómodo o cómoda y cierra los ojos. Comienza a ser consciente de tu respiración y solo respira lenta y profundamente. Con cada respiración, permítete relajarte cada vez más.

Ahora, poco a poco, incorpora el mantra ANANDA HUM, ANANDA HUM. Este mantra despierta el estado de plenitud que es su verdadero Ser

ANANDA es la satisfacción inherente, la alegría y la plenitud de la existencia. Repite en silencio: ANANDA HUM, ANANDA HUM, ANANDA HUM. Con cada repetición, siente tu cuerpo, mente y espíritu abiertos, y recibe un poco más.

Cada vez que te sientas distraído, distraída, por tus pensamientos o por los ruidos del entorno, simplemente regresa tu atención y empieza a repetir mentalmente el mantra: ANANDA HUM, ANANDA HUM, ANANDA HUM

Por favor continúa con la meditación. Yo estaré atento al tiempo transcurrido y al final me escucharás hacer sonar una suave campana. ANANDA HUM, ANANDA HUM, ANANDA HUM. . .

Es momento de liberar el mantra. Sigue sentado y relajado, inhala y exhala lentamente. Cuando estés lista, listo, abre los ojos despacio.

Al transcurrir tu día, ten en cuenta este pensamiento central:

CUANDO ESTOY SATISFECHO, NO ME FALTA NADA.

CUANDO ESTOY SATISFECHO, NO ME FALTA NADA.

Namasté 💗

PREGUNTA 1: Escribe sobre una carencia en tu vida que estás llenando con antojos o malos hábitos.

PREGUNTA 2: Ahora, escribe cómo puedes abordar de forma más directa esa carencia. Por ejemplo, si la falta de autoestima es en gran medida lo que te impulsa a tener hábitos poco saludables, piensa en ayudar a alguien usando un talento que tengas. Podría ser impartir clases de piano, si eres músico, o ayudar a alguien a resolver los gastos de su negocio si eres bueno para los números.

PREGUNTA 3: Haz una lista de las áreas de tu vida en las que ya te sientes pleno y luego escribe cómo puedes empezar acrecentar esa plenitud.