Mensaje del día
Día 22: Todos los días hay un motivo de celebración.
A medida que la vida se vuelve más rica y plena, toda nuestra perspectiva cambia. Vemos que la vida misma, el simple hecho de estar aquí, es motivo de celebración. Celebramos que el Ser verdadero nos da amor y apoyo constante. Reconocemos que en el centro del espíritu de cada ser humano hay libertad, amor y alegría. En un mundo lleno de cargas, esta es la verdad más edificante que podemos seguir.
Texto
Día 22: TODOS LOS DÍAS HAY UN MOTIVO DE CELEBRACIÓN
La riqueza de la vida es de todos. Estar aquí es digno de celebrarse todos los días. Sin embargo, la riqueza también genera humildad. El poeta místico inglés William Blake dijo alguna vez sobre sus poemas: “Son míos y, sin embargo, no lo son”. En otras palabras, era consciente de que la inspiración llegó a través de él; él fue su destinatario, no quien los creó. Del mismo modo, somos capaces de ser destinatarios de la verdad, la libertad y el amor. Son atributos que nos transforman y, sin embargo, no hicimos que sucedieran.
La existencia misma es de donde provienen la verdad, la libertad y el amor. Cuando te das cuenta de ello, suceden dos cosas. En primer lugar, hay una sensación de alivio porque puedes deshacerte de esta carga: la carga de ser bueno y perfecto. La mejor persona que puedas ser, sin duda, es alguien totalmente ligero y libre de demandas.
En segundo lugar, viene un sentido de la humildad. Al estar rodeados por un campo de posibilidades infinitas, no podemos sentirnos orgullosos de nosotros mismos ni creer que estamos por encima de los demás. Sencillamente, hemos encontrado nuestro lugar en la historia interminable de la evolución humana, que se ha desplazado de la evolución física hacia una nueva fase. En esta fase, cada persona evoluciona conscientemente, viviendo una visión de la vida que llega hasta donde nosotros queremos.
Habrá espacio para aquellos que elijan conformarse con los valores y comportamientos convencionales, pero ahora hay más espacio para las personas que toman el camino espiritual que ellas mismas han definido. Como un maestro sabio dijo una vez: “No puedes entrenarte para ser libre”. No hay disciplina que te libere de viejas heridas, recuerdos y condicionamientos.
Lo que nos libera es la experiencia de la libertad. Estoy usando la palabra en términos generales, para incluir la libertad en el amor, para crear y expandirse. Con cada experiencia, es natural que quieras más libertad y, en ese caso, tu verdadero yo encontrará una manera de darte más.
La espiritualidad se reduce a un proceso sencillo. Experimenta las cosas que más valoras, internamente, pide que haya más, y escucha la respuesta de tu verdadero Ser que guiará tu siguiente paso. La existencia fue diseñada para liberarnos, y nuestra tarea es aceptar ese regalo tan increíble con humildad y alegría.
Mientras nos preparamos para meditar juntos, consideremos por un momento nuestro pensamiento central:
TODOS LOS DÍAS ACEPTO EL INCREÍBLE DON DE ESTAR AQUÍ
TODOS LOS DÍAS ACEPTO EL INCREÍBLE DON DE ESTAR AQUÍ
Ahora, vamos a prepararnos para nuestra meditación. Ponte cómodo o cómoda y cierra los ojos. Comienza a ser consciente de tu respiración y solo respira lenta y profundamente. Con cada respiración, permítete relajarte cada vez más.
Ahora, poco a poco, incorpora el mantra ... LILA HUM... LILA HUM... Este mantra celebra la alegría, la libertad y la alegría inherentes a la vida. Repite en silencio ... LILA HUM... LILA HUM... LILA HUM...
Con cada repetición, siente tu cuerpo, mente y espíritu abiertos, y recibe un poco más. Cada vez que te sientas distraído, distraída, por tus pensamientos o por los ruidos del entorno, simplemente regresa tu atención y empieza a repetir mentalmente el mantra ... LILA HUM... LILA HUM... LILA HUM . . .
Por favor continúa con la meditación. Yo estaré atento al tiempo transcurrido y al final me escucharás hacer sonar una suave campana ... LILA HUM... LILA HUM... LILA HUM . . .
Es momento de liberar el mantra. Sigue sentado y relajado, inhala y exhala lentamente. Cuando estés lista, listo, abre los ojos despacio.
Al transcurrir tu día, ten en cuenta este pensamiento central:
TODOS LOS DÍAS ACEPTO EL INCREÍBLE DON DE ESTAR AQUÍ
TODOS LOS DÍAS ACEPTO EL INCREÍBLE DON DE ESTAR AQUÍ
Namasté 💗
PREGUNTAS DE REFLEXIÓN
1: La mejor persona que puedes ser ahora es quién eres ahora. ¿Cuáles son tres atributos de tu yo actual que admiras?
2: La libertad es la sensación que se produce cuando aceptas la ligereza y la alegría de tu existencia, en este preciso momento. Escribe cómo encontrar alegría en tu vida, no en el futuro, sino en este preciso momento que estás viviendo.
3: Si se te apareciera un ángel y te preguntara en qué sentido tu vida es una bendición para ti y los demás, ¿Qué le dirías?
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