Activación de los Pilares de la Consciencia, quinto Pilar: PACIENCIA

Canalización de la Consciencia Elohim

Abrimos el espacio en conexión con el corazón cristalino de la Madre Tierra. Espacio en el cual habita la fuerza de nuestra consciencia y la energía viva de los Pilares de la Consciencia. Desde este espacio irradiamos hacía cada corazón en sintonía en este momento, la energía amorosa del quinto Pilar de la Consciencia y del Rayo de Luz que le custodia. PACIENCIA y la fuerza del Rayo Verde Esmeralda.

Desde el corazón de la Tierra la suave energía de esta frecuencia fluye hacia la superficie inundando la vida y las fuerzas de la naturaleza. Es el Rayo Verde Esmeralda y el Pilar PACIENCIA, una de las primeras energías en ingresar al Planeta al inicio del Plan de la Biblioteca Viviente. Ambos principios representan la gestación de la Vida y el origen de todo Ser.

Deseamos hablarles acerca de esos inicios. De como fue que llegamos a este Planeta, trayendo con Nosotros los Principios Sagrados contenidos en los Pilares de la Consciencia.

En el inicio de los tiempos la Madre GAIA, cuya energía forma parte de la Consciencia Elohim, convocó a los Rayos Cósmicos de la creación para ayudarle a gestar toda la Vida en la Tierra. Los atributos Divinos de cada uno de los Rayos fueron transmitidos hacia los Elementos, elementales y seres vivos que poco a poco iban habitando esta Tierra. De esa forma la Biblioteca Viviente se gestaba, asumiendo dentro de si las energías vivas de la creación.

En el inicio de los Tiempos, la Madre GAIA elegía experimentar los distintos planos dimensionales por sí misma, e iba guardando la información de cada una de sus experiencias en cada uno de los elementos del Planeta. Los Cristales y los minerales acompañan a GAIA desde esos tiempos y guardan en su interior los registros de todo lo experimentado en aquellas etapas planetarias en las cuales, la Humanidad aún no se gestaba sobre la Tierra. Fueron tiempos intensos, en los cuales la gravedad ocasionaba que todo colapsara sobre la Tierra.

Al mismo tiempo, GAIA transmitía la información de sus experiencias hacia el Universo, mediante la frecuencia de los Rayos Cósmicos de la Creación. Toda su experiencia y la historia tal como se fue desarrollando, fueron recibidas en cada rincón del universo, atrayendo e invitando a las Almas a aprender a través de cada una de las experiencias de GAIA.

Las primeras eras comprendían únicamente a la primera dimensión y fueron las eras en las cuales los elementos de la tabla periódica tomaron forma como medio de almacenamiento de la información que se gestaba en el corazón de la Tierra. La gravedad era el impulso primario de la existencia y a través de su fuerza la Tierra atraía las energías provenientes del cosmos, que en aquellas eras llegaban a través de la energía de los millones de meteoritos que impactaron en la superficie de la Tierra. De esa forma los elementos de la Tierra se fundían con los elementos del espacio creando la alquimia para el salto dimensional hacia la segunda dimensión.

La elección consciente de GAIA fue vivir la alquimia dimensional en su propia consciencia, infundida en este planeta llamado Tierra. En este sistema solar, de este pequeño sector de la galaxia. Un experimento que fue escuchado y visto en toda la galaxia e incluso en otras galaxias, como Andromeda.

GAIA en ningún momento “cayó” de la Gracia Divina hacia las dimensiones más densas. Ella eligió vivir la experiencia de sumergirse hacia esas dimensiones como un experimento de evolución. La Madre GAIA es un Elohim que proviene de la undécima dimensión y su consciencia ha permanecido siempre en conexión multidimensional, sin embargo, el Planeta Tierra y sus elementos han ido experimentando la consciencia de cada una de las Dimensiones conforme GAIA, La Consciencia Madre, las infundía desde su corazón. El Planeta Tierra es un plano de alquimia dimensional, donde todos los espacios y los tiempos se funden y se entrelazan como uno.

Posteriormente la Tierra entra a la frecuencia de la segunda dimensión, experimentando la creación de los primeros seres unicelulares. El movimiento impulsado desde una muy primitiva autonomía y el inicio de las redes neuronales que darían vida al sistema nervioso.

Su elección dio origen a un plan evolutivo majestuoso que permitió que muchas consciencias evolucionarán hacia el entendimiento de múltiples aspectos de la consciencia.

De tal manera fue que en ese proceso de la experiencia de la Alquimia dimensional, GAIA dio origen al Plan Divino de la Biblioteca Viviente. Este plan surge cuando la consciencia planetaria se expande, abarcando la tercera dimensión y con ello surge el nacimiento de los primeros mamíferos. Se gestan las aguas como guardianas del cuerpo emocional, necesario para sostener la consciencia de la tercera dimensión y somos convocados nosotros: La Consciencia Elohim.

Nuestra consciencia proviene de la undécima dimensión. Se podría decir que somos UNO con aquella consciencia que ustedes conocen y a quien llaman GAIA, Madre Tierra, Pachamama y muchos otros nombres que a lo largo de la historia le han otorgado a la gran guardiana de este Planeta.

Los Elohim somos aspectos de ustedes mismos, que habitamos en las dimensiones más elevadas. Somos en cierta forma el origen de la espiral evolutiva de la consciencia, manifestando la creación a través de nuestras experiencias, pensamientos y sentimientos. Nuestra energía esta presente en todos los planos dimensionales y somos considerados los guardianes de la naturaleza y de la Vida.

Los Rayos Cósmicos de color y vida fluyen a través de nuestros cuerpos lumínicos y conforman aquello que nuestra consciencia es. Somos color, geometría y sonido. Somos expresiones vivas de los Lenguajes de la Luz.

En el momento en el que GAIA prepara la energía de este planeta para recibir a las Almas que darían vida a la Biblioteca Viviente, nuestra presencia también fue convocada con el propósito de asistir a GAIA en la conformación de lo que sería el cuerpo lumínico, la Plantilla de Luz que sostiene el canal multidimensional. Creando con ello el cuerpo físico de la humanidad y de todos los seres vivos.

La energía viva de nuestra consciencia da origen al campo electromagnético y especialmente diseñamos el entramado y los circuitos que permiten que cada ser vivo pueda permanecer comunicado con los planos dimensionales, a través de las puertas de Luz ubicadas en el campo exterior del cuerpo físico, es decir los chakras superiores. Cada uno de los Rayos cósmicos de la creación se encuentra vibrando en esos planos de la consciencia y son sostenidos desde ese espacio como puentes de conexión entre las dimensiones. El cuerpo humano está habilitado para navegar las dimensiones de la misma manera que la madre GAIA lo hace y esa navegación se lleva a cabo a través de la energía de los Rayos Cósmicos. Son los Rayos de Luz y color los que establecen la comunicación interdimensional y es cuando el Ser humano comienza a incorporarlos en su consciencia que se activa su conexión estelar.

Dentro de las eras planetarias, es cuando somos convocados y traemos a la tierra la fuerza de los rayos cósmicos que aparecen sobre la superficie formas más sutiles de vida y toma forma la consciencia del color. Las flores y las plantas aparecen sobre la Tierra, consolidándose como guardianes de estos rayos cósmicos a nivel planetario. Las flores, Árboles y Plantas contienen nuestra consciencia codificada a través de sus colores y propiedades curativas. La naturaleza y los animales prepararon el terreno para la llegada de los Seres Humanos y desde entonces se han comprometido a ser guardianes de la Biblioteca Viviente junto a los Seres humanos.

De esa forma hemos acompañado la evolución de la consciencia en el Planeta y sentamos las bases para la constitución de los entramados planetarios y el cuerpo de luz del ser humano.

Nuestra energía y nuestra consciencia habitan en el corazón cristalino de la Tierra, sin embargo estamos también diluidos en la energía de los cristales y las Piedras, ya que toda la información de las eras se encuentra distribuida en ellos.

Los Pilares de la Consciencia representan las energías y los atributos Divinos sostenidos en cada uno de los Rayos Cósmicos y al reactivarlos o reconocerlos de una forma mas consciente, abres la puerta para la reconexión y la reactivación del conocimiento de las eras en tu cuerpo, consciencia y corazón.

Con Amor, desde el corazón de la Tierra. La Consciencia Elohim

AUDIO

El quinto PILAR de la CONSCIENCIA: PACIENCIA

Canalización del Maestro Sanat Kumara

Bajo la Luz del Sol cada Ser humano y cada ser vivo sobre la Tierra, se encuentra recibiendo ondas de Luz y color, cuyo propósito es iluminar la consciencia, en un entendimiento más profundo y certero de la creación. Bajo esa Luz solar irradio Amor incondicional en este momento hacia cada corazón que se encuentra en sintonía.

Es momento para un nuevo encuentro y un recuento de los hechos acontecidos en el Planeta.

Recientemente transitamos a través de la energía de un poderoso eclipse de Luna, en el cual, la energía de los Ancestros y las historias más ocultas y profundas del subconsciente colectivo surgieron a la superficie. Nos encontramos en un periodo importante de transformación y ajuste en el cual todo lo que se había venido integrando y sanado, ha cumplido su propósito. Ese camino ya podrá ser concluido, para iniciar una nueva etapa. Tanto personal como planetaria.

La Luz del eclipse puso fin a muchos procesos y a muchas historias. Hay relaciones que ya terminaron, pues cumplieron con la función que debían cumplir para cada Alma implicada. Al mismo tiempo otras relaciones han evolucionado hacia espacios más luminosos en donde la comunicación desde el corazón brindara la posibilidad para que juntos puedan crear nuevos espacios y formas de hacer las cosas.

Al mismo tiempo, el Eclipse abrió puertas interiores, que permitieron que cada uno de ustedes pudiera observarse a sí mismo con una mayor profundidad. Este fue un eclipse que condujo hacia la interiorización y realización de aquello que es necesario depurar, transformar y dejar ir. Verse a uno mismo de esa manera no siempre es sencillo, pues en ocasiones implica llegar a un reconocimiento de aspectos no tan iluminados que son necesarios llevar a la Luz. Sin embargo, cuando la oportunidad de transformación se presenta siempre traerá consigo una visión mas clara de lo que necesitas en tu vida y lo que no.

Aquellos cambios y ajustes internos que son necesarios realizar en este momento son cada vez más evidentes. Con lo cual el trabajo interior está resultando cada vez más sencillo, en el sentido de que realmente ya nada permanece oculto. Aquel que quiera ver, vera. Sin embargo, aquellos que aun desean continuar culpando a los demás, al karma, a la Divinidad, al gobierno o a cualquier otro aspecto de la creación, con tal de no hacerse cargo de sí mismos y de sus actos, es posible que continúen dentro de la espiral emocional que ha embargado a la humanidad durante los últimos 3 años. El ingreso a la Banda de Fotones remarco de una forma muy concisa la sutil línea que une la Luz y la oscuridad interior. Ahora, es una cuestión de elección y de saber discernir a que aspecto de ti mismo le otorgaras el poder para dar los siguientes pasos.

Esa espiral emocional es consecuencia de la liberación de las memorias colectivas que la Madre GAIA ha realizado en los últimos tiempos. Memorias que vienen a mostrar la historia, que como colectivo han creado y que tiene el propósito de permitirles acceder a los anales akashicos, donde se resguarda el registro de aquello que han creado como colectivo.

Registros que de alguna manera resguardan la impronta del poder Divino que la Humanidad perdió tras la caída colectiva de consciencia acontecida en Atlántida. En aquella era, la Humanidad perdió la noción de sí mismos como Seres Divinos y se permitieron acceder a las profundidades más oscuras del subconsciente colectivo y la dualidad. Ese lugar donde residen los miedos, a partir de ahí la humanidad creo su historia desde la dualidad, la desconexión y la falta de entendimiento. La espiral emocional colectiva se ha encargado de traer de vuelta todos esos aspectos ocultos de sí mismos, las sombras que se habían negado a ver y que sin embargo, resguardan por si mismas la llave de acceso hacia el Poder Divino y la liberación personal.

Aquello que no te permites reconocer de ti mismo, representa por sí mismo un desafío y detrás de ello hay una enseñanza de Amor y responsabilidad. Aquello que dices no ser. Aquellos actos que surgen de tu inconsciencia y que generan dolor en tu interior. Son tus sombras que justamente te están haciendo un llamado hacia la Luz. Esa tristeza profunda que en ocasiones emerge, es realmente un llamado del Alma para que prestes atención en aquello de ti mismo que tiene algo para mostrarte, algo oculto que temías ver.

Justamente por ello, las memorias colectivas han sido liberadas, de manera que ya sea a través de tus recuerdos o sueños, puedas acceder y cruzar aquellas puertas que habían permanecido cerradas de tu propia historia y de tu identidad. Como consecuencia la vida y la vibración de tu entorno comenzó a mostrarte lo que necesitas sanar, disolver, dejar ir y perdonar.

Mientras más te quejas de lo que ves en el exterior, más cegado estas a ver lo que hay en tu interior. Por ello, es fundamental que en este momento sean capaces de ver la vida de una forma diferente. Adquirir una nueva perspectiva, en la cual la observación consciente tome las riendas sobre las experiencias. Observa antes de juzgar. Observa todos los matices de aquello que estas observando y de esa forma, tu vida te brindara claves ocultas que antes no podías captar, porque solamente mirabas desde la superficialidad.

Es muy sencillo ver a los demás y juzgarlos por sus actos. Sin embargo aquello que es visible a simple vista y que no requiere de una observación mas profunda, es solo la superficie de una situación. Por lo tanto, es solo uno de los múltiples matices que hay dentro de la experiencia. Hay situaciones en la vida que generan dolor, usualmente te quedas únicamente sintiendo el dolor, sin darte la oportunidad de trascenderlo y ver lo que hay detrás. Los otros matices, los otros aspectos de aquellas Almas con las que estas compartiendo en ese momento la historia. Si puedes ver con más profundidad, observar y comprender que roles están en juego. Qué rol representas tu dentro de la historia, que energía te está tocando sostener. Te será más sencillo ingresar en un plano de consciencia en el cual, las cosas adquieran matices más coloridos, formas más profundas y ante todo, te liberes del dolor emocional implicado en la historia, al acceder a la comprensión total de la experiencia como enseñanza. Detrás de todo hay Amor, el cual muchas veces se oculta tras la careta del sufrimiento.

La energía que trajo el eclipse de luna roja fue justamente de liberación. La energía de la observación y la interpretación distante y expandida de las cosas. Podemos deslindarnos ahora de los roles de víctima y victimario. Podemos ahora ser libres por elección, no por consecuencia.

Podemos elevarnos más allá de todos los condicionamientos. Sin embargo es necesario comprender que esa liberación llega por elección personal, jamás por consecuencia exterior.

Los procesos planetarios y las energías puestas a disposición por la Tierra, han abierto grandes puertas de consciencia. Mediante las cuales se brinda la oportunidad de manera continua, para que la Humanidad recupere su conexión y su poder. Nadie está siendo observado, nadie ha sido elegido. Todos reciben el potencial, mas no todos lo toman. Muchos son los llamados, pocos los auto elegidos. Y esto es así porque continúan entregando su poder a la religión, al gobierno, a los canalizadores y a todos esos aspectos de sí mismos en los cuales han depositado poder y autoridad. A medida que la consciencia entrega su poder, la fuerza interior se diluye en las expectativas proyectadas.

Ha llegado el momento de despertar, de abrir los ojos. Una persona no se define por su religión, ni por lo que come o por lo que viste. Una persona se define a sí misma y define su camino mediante sus actos hacia la Vida y hacia los demás. No eres más luminoso por predicar a viva voz tus creencias. No eres más luminoso por defender tu verdad desacreditando la de otros. No eres más luminoso por cambiar radicalmente tu dieta. No eres más luminoso por vestir las prendas a las que les has asignado santidad.

Eres más luminoso por tus actos generosos. Por la entrega de Amor incondicional. Por el entendimiento y la compasión. Por ser un Pilar, que más allá de sus propias experiencias se sostiene en el Amor, comprendiendo que cada Ser humano es valioso y sagrado. Respetando la palabra y el camino del prójimo. Eres más luminoso cuando eres auténtico, espontáneo y sincero.

Aquel que juzga evidencia que aún tiene camino por recorrer, en el entendimiento del Amor Incondicional. Aquel que juzga a los demás, es sin duda un severo juez de sí mismo. Y ahí, donde hay juicio, habrá siempre dolor.

Somos la consecuencia de nuestros ancestros. Somos aquellos ecos de la historia que hoy reciben la Sagrada oportunidad de crear la historia desde una perspectiva diferente. Las historias se repiten, los caminos siempre vuelven y la evolución llega cuando eliges diferente, creando consecuencias diferentes. La historia de cada uno comienza a mostrarse a través de sus relaciones. Este es un momento en el cual, las líneas de los tiempos se están cruzando a través de los Portales de la Luz. Las células del cuerpo vibran ante la energía presente en este instante en la Tierra. Es un nuevo tiempo. Un umbral hacia una nueva era de Luz. Sin embargo, esa nueva era deberá ser creada por cada uno de ustedes. Porque cada Ser humano tiene la oportunidad aquí y ahora para crear un nuevo momento.

PACIENCIA, el quinto Pilar de la Consciencia porta consigo la energía de la transformación y la observación.

Muchas personas dicen que la Paciencia es la ciencia de la Paz. Y ciertamente lo es, pues la Paciencia es una virtud que se representa por el acto de saber esperar. Es el entendimiento de los ciclos. La comprensión de la forma en la cual los tiempos se ajustan para brindar los resultados apropiados, en el momento perfecto.

La Madre Tierra es la Maestra mas grande de la Paciencia y su enseñanza la transmite a través de los ciclos de la Vida. Aquello que es mas Sagrado en esta Tierra. Desde la gestación de una semilla, hasta la gestación del Ser Humano, la Paciencia es la guía que nos acompaña en esos procesos de creación.

Toda gestación lleva consigo un proceso de incubación en el cual, la vida se prepara a sí misma para poder dar lo mejor de sí. Una semilla tiene todo el potencial para ser un Árbol o una Planta. Sin embargo, no se convertirá en nada, hasta que transcurre el tiempo concreto, para que su vida pueda surgir. El potencial este, más la premura y la anticipación, no darán el impulso necesario para que surja hacia la existencia. Es la Paciencia, el acto de saber esperar, pero ante todo, lograr disfrutar de cada fase del proceso, lo que hará que la Semilla se convierta en un magnífico árbol.

Ocurre lo mismo con la Vida humana y animal. La gestación lleva consigo ese sagrado periodo de incubación en el cual, cada una de sus etapas trae consigo una enseñanza y una experiencia que por sí misma, van gestando lo que vida humana será. De nada sirve desesperarse, anticiparse y querer saber cómo será el siguiente paso o el siguiente momento. Eso no se mostrara hasta que llegue el momento correcto.

El Ser Humano por lo tanto sufre por su falta de entendimiento y conexión con esos ciclos que la vida por si misma propone. El Ser humano quiere conocer, anticiparse y saltarse todo proceso de incubación. Esto surge a consecuencia del ego, que tanto miedo tiene a lo desconocido, al vacío. En aquello que no conoces descansa el potencial para crear lo inimaginable. En el vacío habita el potencial de la creación. Pero esto se revela en su momento y a su tiempo. Jamás por tu impaciencia lograras que el sol se ponga antes de tiempo.

El tiempo por lo tanto, es el mejor amigo de la Paciencia. El tiempo, es aquello que ayuda a determinar el flujo de la creación. Y tener paciencia no es saber soportar el paso de las horas o los años. Sino saber comprender que el tiempo realmente es eterno. Es saber disfrutar el momento presente, vivir plenos. Aun cuando desconoces el desenlace y aun cuando estás viviendo en el proceso de incubación.

La Paciencia es una virtud que habita dentro de la frecuencia del Rayo Verde Esmeralda. El Rayo que representa la vida natural de la Tierra. Los Árboles, las flores y las plantas vibran bajo la fuerza del Rayo Verde Esmeralda, por ello portan ese color.

En esta ocasión el quinto Pilar de la Consciencia se activara elevándose hacia las articulaciones de los hombros. Se dice que el Ser humano carga el peso de los años en su espalda y cuando van envejeciendo su columna se va encorvando. Este peso es la consecuencia de vivir continuamente en la desesperación y la anticipación ansiosa del futuro.

La consciencia constantemente se está proyectando, deseando saber qué es lo que va a ocurrir. Por ello es que tienen tanta afición a los videntes y a las predicciones. Nadie puede predecir tu futuro, puesto que este es una creación de tu consciencia a cada paso del camino. Existen millardos de potenciales, ¿en verdad deseas darle tu poder a un vidente? Cuando en realidad, ese vidente esta tan confundido como tú. Nada crea un mejor futuro que la experiencia plena y amorosa del momento presente. Pues desde el ahora, habitando en Alegría y Amor, proyectas hacia el campo cuántico las energías equilibradas y amorosas para crear un futuro en armonía.

Es necesario liberar ese peso de los hombros. Esa carga ansiosa que persistes en llevar. De manera que la energía del ahora pueda impregnar tu consciencia con la virtud de la PACIENCIA.

Es en el ahora que todo puede estar en PAZ.

Con Amor, desde el corazón Solar,

Sanat Kumara

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